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10 de Diciembre 2019
Por Charlotte Greenfield
WHAKATANE, Nueva Zelanda, 10 dic (Reuters) – La policía de Nueva Zelanda inició una investigación el martes después de que una erupción volcánica en una isla popular entre los turistas matara a cinco personas, hiriera a más de 30 y dejara a ocho personas desaparecidas, que se teme que también hayan fallecido.
La primera ministra Jacinda Ardern dijo que los vuelos de reconocimiento no mostraban señales de vida en White Island, mientras los testigos detallaban las horribles quemaduras que sufrieron las personas atrapadas en la erupción del lunes.
“La magnitud de esta tragedia es devastadora”, dijo Ardern en el Parlamento. “A los que han perdido o están desaparecidos, compartimos su dolor y pena y estamos devastados.”
La policía dijo que había 47 personas en la isla deshabitada en el momento de la erupción: 24 de Australia, nueve de Estados Unidos, cinco de Nueva Zelanda, cuatro de Alemania, dos de China y el Reino Unido y uno de Malasia.
“Yo sugeriría claramente que no hay nadie que haya sobrevivido en la isla”, dijo el vicecomisario de la policía John Tims sobre las ocho personas que siguen desaparecidas.
De los 31 heridos, al menos 27 sufrieron quemaduras en más del 71% de la superficie del cuerpo, y algunos podrían morir a causa de sus heridas, dijo Peter Watson, responsable sanitario de la Administración.
Las unidades de quemados en toda la nación del Pacífico Sur, de 4,5 millones de habitantes, están al máximo de su capacidad, agregó.
La policía dijo que había iniciado una investigación sobre las muertes en White Island, pero aclaró que no se trataba de una investigación criminal.
La agencia neozelandesa de riesgos geológicos GeoNet elevó el nivel de alerta del volcán en noviembre debido al aumento de la actividad volcánica. La última erupción fatal del volcán fue en 1914, cuando mató a 12 mineros.
Sin embargo, las excursiones diarias atraen a más de 10.000 visitantes cada año a esta isla de propiedad privada, que se comercializa como “el volcán marino activo más accesible del mundo”.
“Tengo que decir que estoy muy sorprendido de escuchar que ha habido visitantes allí hoy, porque los científicos parecen haber sido muy conscientes de que White Island estaba entrando en una fase de mayor actividad”, dijo el vulcanólogo de la Universidad de Drexel Loÿc Vanderkluysen.
“He estado en White Island antes, pero no creo que me hubiera sentido cómodo estando allí hoy.”
Una cámara situada en el borde del cráter de operada por GeoNet mostraba a un grupo de personas alejándose del borde del cráter justo un minuto antes de la explosión.
“Ahora está claro que había dos grupos en la isla: los que pudieron ser evacuados y los que estaban cerca de la erupción”, dijo Ardern en una conferencia de prensa matutina en Whakatane, una población de la costa este de la isla, a unos 50 kilómetros de White Island.
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(Información de Charlotte Greenfield en Whakatane y Praveen Menon en Wellington, información adicional de Barbara Goldberg en Nueva York; escrito por Jane Wardell y Raju Gopalakrishnan; editado por Lincoln Feast y Gerry Doyle; traducido por Andrea Ariet en la redacción de Gdansk)
